Por FRANCISCO RODRÍGUEZ GARCÍA y LOURDES M. MOLINA
Sobre las 3:33 minutos de la tarde de este miércoles 6 de septiembre, el vuelo AZA4000 de Alitalia, el Pastor I, que transporta a su Santidad el Papa Francisco, ha cruzado la frontera entre Venezuela y Colombia, a la altura de Cúcuta, la capital de Norte de Santander, “pisando” oficialmente el cielo colombiano.
El Papa Francisco llega a una América y a una Colombia sedientas de reconciliación, máxime cuando Venezuela ha vivido un último semestre agitado por la violencia política y las graves dificultades socioeconómicas, y a una comunidad colombiana que lo aguarda con ansiedad de reconciliación, tras haber alcanzado la paz con las Farc, luego de medio siglo de violencia.
Pero además, con una tregua recién acordada con el ELN y la solicitud de la banda criminal Clan del Golfo, una sangrienta organización delincuencial que ha ocasionado serias dificultades de violencia.
El alto gobierno colombiano, encabezado por el Presidente Juan Manuel Santos, empresarios, víctimas de la violencia lo aguardan en el Aeropuerto El Dorado de Bogotá.
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