En 2019 Colombia tendrá más de 800.000 empresas usando facturación electrónica

Beneficio  a la hora del manejo de la información de compras digitalmente y estandarizada.

Redacción ABC DE AMÉRICA

El momento de hacer la migración se acerca con más velocidad para todos los colombianos y es importante que estés listo y tengas la información necesaria para que este cambio sea lo más sencillo posible.

Aún cuando parte de las preocupaciones en torno al tema tienen que ver con los costos de la migración un estudio realizado por Billentis concluye que la facturación electrónica reduce los costos de los procesos relacionados con papel entre un 50% y un 80%, y la inversión se recupera dentro de los seis primeros meses siguientes.

Como sistema de gestión, esta modalidad de facturación convierte el proceso manual de emisión y recepción de documentos como facturas y notas de crédito y débito en un proceso de intercambio de información electrónica, generando agilidad, reducción en las equivocaciones y disminución de costos.

La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) calcula que la emisión de una factura electrónica cuesta 820 pesos versus una física que vale alrededor de 2,650 pesos.

“Uno de los puntos claves es que la autorización como proveedor tecnológico demuestra que hemos pasado todas las pruebas de la DIAN. Para nosotros es un paso en firme en nuestra apuesta por el país y que nos permitirá seguir creciendo en el mercado” afirma, Lucio Quijano, Country Manager para Colombia de Gosocket.

Así mismo, la facturación electrónica responde a la política de ‘cero papel’ que busca disminuir considerablemente el uso de este recurso y contribuir así a la conservación del medio ambiente.

La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) calcula que la emisión de una factura electrónica cuesta 820 pesos versus una física que vale alrededor de 2,650 pesos; con lo cual se logra una importante reducción de gastos para este rubro.

No más facturas de proveedores (recepción, digitación, aceptación/ rechazo manuales, errores de procesamiento, llamadas telefónicas, almacenamiento y gestión físicamente).

En Colombia, las empresas en su camino hacia la transformación digital deben adoptar la facturación electrónica como un servicio global que responde a las necesidades de un consumidor digital cada vez más exigente.

Además, este modelo de facturación permite simplificar la operación, disminuir costos, facilitar el acceso a datos y obtener procesos más transparentes y eficientes en el flujo de información que se establece entre el gobierno y las empresas. Queda menos de año y medio para que el 100% de la facturación sea obligatoriamente electrónica en el país, por lo que ir planeando el cambio es importante.

“Esta solución es única en su tipo en Colombia y Latinoamérica, pues de manera amable y simple permite recibir, administrar y manejar facturas electrónicas en un solo lugar, sin importar si uno trabaja en supermercado, una droguería o cualquier otro negocio, mejorando la relación entre negocios y proveedores de forma simple y sin costo, recibiendo o generando solicitudes y ofertas de negocio de manera gratuita”, manifestó Lucio Quijano, Country Manager de Gosocket para Colombia.

Mejora la comunicación con clientes  respecto a las aceptaciones y rechazos.

La Dian también estableció como meta que por lo menos 50.000 empresas facturen el 100% de sus documentos electrónicamente, por lo que esta entidad obligará a los grandes contribuyentes a implementar la facturación electrónica antes del 2019. En caso de no cumplir, se aplicarán las sanciones correspondientes.