Este martes ha sido bastante tenso para los habitantes de las poblaciones colombianas cercanas al volcán Nevado del Ruíz, cuyas fumarolas de humo y cenizas se han elevado hasta los casi 2.000 metros de altura, al punto que el Servicio Geológico Colombiano ha reportado un mayor nivel de actividad en las últimas horas.
Las siguientes son las imágenes entregadas por @sgcol.
Emisión de ceniza del Volcán Nevado del Ruiz, hoy 18 de abril a las 07:11 a.m., altura de la columna 1800 m desde la cima del volcán, dispersión al suroriente#SGCVolcanes pic.twitter.com/2MQ9DT7txM
— Servicio Geológico Colombiano (@sgcol) April 18, 2023
Si bien la sismicidad de fractura puede variar y cambiar de localización, la presencia de anomalías térmicas en el fondo del cráter mayores a las presentadas en meses anteriores, asociadas con la salida -en ocasiones continua- de ceniza, son parámetros que indican un nivel mayor de actividad de este con respecto a semanas anteriores, los cuales deben ser monitoreados de manera permanente y especial, reportaba la entidad encargada de monitorear al volcán.
Otras imágenes daban cuenta de la espectacularidad del fenómeno.
Así amaneció el volcán Nevado del Ruiz este martes 18 de abril. pic.twitter.com/ieUifEWU48
— Ana (@PuraCensura) April 18, 2023
Ayer, la actividad sísmica asociada a fracturamiento de roca al interior del edificio volcánico mostró un leve aumento en el número de sismos respecto al día anterior (17 de abril).
Este tipo de sismicidad continúa, principalmente, caracterizada por la ocurrencia de sismos pequeños, localizados en el cráter Arenas, los cuales se asocian a la actividad del domo (protuberancia o montículo) de lava ubicado en el fondo del cráter. La sismicidad que se localiza al suroccidente del volcán también presentó niveles bajos en energía y se mantuvo a una distancia promedio del cráter de 4,0 km.
Todos estos indicadores ratifican lo que desde el SGC hemos reiterado desde hace días que la actividad del volcán Nevado del Ruiz sigue siendo muy inestable. Si bien la sismicidad de fractura puede variar y cambiar de localización, la presencia de anomalías térmicas en el fondo del cráter mayores a las presentadas en meses anteriores, asociadas con la salida -en ocasiones continua- de ceniza, son parámetros que indican un nivel mayor de actividad de este con respecto a semanas anteriores, los cuales deben ser monitoreados de manera permanente y especial.