Microtia, un fenómeno al que hay que ponerle el ojo y el oído

La ausencia o los cambios en la forma de la oreja y que se origina por elementos hereditarios son recordados hoy 9 de noviembre, cuando se conmemora el Día Internacional de la Microtia.

La ciudad ‘campeona’ en casos de microtia es Bogotá, según un estudio de la Pontificia Universidad Javeriana. La forma de presentación más frecuente es la microtia unilateral y del lado derecho y por lo regular, los pacientes con esta afección presentan pérdida auditiva en el lado afectado, según el grado.

Se calcula que en Colombia hay más de 560.000 personas sordas pero hay 5 millones de personas en riesgo de pérdida auditiva y ciudades como Bogotá, Medellín y Cali, son las más afectadas por esta situación, según el Ministerio de Salud.

En la actualidad, en el mundo existen alrededor de 466 millones de personas que sufren sordera moderada o severa y se estima que en 2030 la cifra llegará a 630 millones y en 2050 casi 900 millones, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

“La microtia tiene diferentes causas, algunas son genéticas y en otros, cuando hay una dificultad en el embarazo, que la volvería congénita: cuando la madre tiene deficiencia en la alimentación de carbohidratos o ácido fólico, puede incrementar el riesgo de tener un bebé con microtia. También las mujeres con diabetes antes de quedar embarazadas o medicamentos como Isotreitinoina y abusos de sustancias, generan mayor probabilidad de adquirirla”, comenta comenta Jonathan Bareño, audiólogo de MED-EL.

Se conocen cuatro tipos de microtia:

1. Pabellón pequeño

2. Tejido residual de cartílago con presencia de algunas estructuras del

pabellón auricular

3. Masa de tejido irregular sin parecido al pabellón auricular

4. Ausencia de pabellón auricular. Este tipo de malformación es más frecuente de forma unilateral, casi del 80 al 90% de los casos son así y más en el lado derecho, por lo que presentan hipoacusia conductiva. Sin embargo, es importante destacar que es tratable a través de un sistema de conducción ósea, el

cual consiste en colocar un dispositivo ergonómico bajo la piel que genera vibraciones y las transmite al oído interno a través de los huesos del cráneo, o por medio de una solución no implantable de conducción ósea, señala Bareño.

Aunque es extraño, la microtia se puede manifestar en los dos oídos, aunque en la mayoría de los casos, sólo compromete uno de los dos.