En conjunto con la tienda sexual Erotique Pink, la SASH publicó un informe que arrojó datos impresionantes sobre la sexualidad de las argentinas. EL sondeo, que consultó a 500 mujeres de entre 18 y 60 años, reveló que el 68% de las féminas argentinas había fingido orgasmos algunas vez.
La investigación dejó en evidencia otro aspecto de la sexualidad de las argentinas: un 63% aseguró que su interés por el tema es de moderado a bajo y sólo un 37% admitió tener un alto interés sexual.Entre las que fingieron orgasmos, al consultar con qué frecuencia lo hacían, el 54% dijo que “casi nunca”, el 26% respondió que “pocas veces”, el 13% dijo “a veces” y un 7% admitió que “casi siempre”.
Francesca Gnecchi, directora de Erotique Pink y comunicadora especializada en Sexualidad Humana manifestó en el informe que “la mujer en el plano sexual carga con la mochila del pasado en el que su disfrute estaba oculto y en el que las relaciones estaban dadas por y para la reproducción”.
“Esa mochila llenó a las mujeres de tabúes y de miedos en nuestras casas, en nuestras escuelas nunca se nos habló sobre la importancia de la autoexploración, los orgasmos, el reconocer nuestro cuerpo y sentirnos a gusto, es por eso que cuesta que las mujeres logren liberarse para poder disfrutar plenamente del acto sexual”, explicó Gnecchi.
Según aclara el documento, la anorgasmia es una de las disfunciones sexuales que impide el disfrute de un vínculo amoroso. Se califica como ‘primaria’ cuando el clímax no se logra bajo ningún método de estimulación ya sea masturbación, sexo oral, entre otros y ‘secundaria’ si se ha alcanzado en el pasado, pero no en el presente.Alrededor del 90% de los causas de la anorgasmia se deben a cuestiones psicológicas y no fisiológicas, indicó el texto.
Sobre este aspecto, Silvina Valente presidenta de la SASH aclara que “las causas están dadas por una ansiedad de rendimiento. La mujer se ubica en un rol de espectadora y va encuentro para agradar al otro y su atención está en el otro y no en ella”.
“Si bien las relaciones sexuales no tienen que ser egoístas, sí tienen que ser egocéntricas y muchas de estas mujeres ponen la atención en la otra persona y viven la sexualidad del otro y no la suya. Otras mujeres se encuentran inhibidas y se cohíben frente al acto sexual”, aseguró Valente.
La directiva explicó que para llegar al orgasmo es importante conectarse con uno mismo, con su cuerpo, emociones y sensaciones. “Ser honestas con uno mismo, tener el permiso de pedir sin sentir vergüenza, lo más importante (…) es la gratificación en el encuentro sexual”, concluyó.
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